Autonomía: la otra cara de la discapacidad

Con motivo del Día de la discapacidad repasamos algunos puntos claves de la diversidad funcional en la sociedad actual

Conceptos clave

La diversidad funcional es concepto multidimensional, que incluye varias esferas de la salud de la persona. Existen varios tipos de discapacidad con diferentes causas. A pesar de que las más reconocidas socialmente sean la física e intelectual, existen muchos otros tipos, como la sensorial o múltiple. Esto tiene especial importancia, ya que al invisibilizar algunos tipos de discapacidad se están invisibilizando las necesidades de una parte importante de la población con respecto a su salud.

La discapacidad es, por tanto, una cuestión que atañe no sólo a la esfera física o mental del concepto holístico de salud, sino también a al esfera social. Es por ello que se trata de una cuestión de salud pública y que, por el beneficio de toda la sociedad, se debe de avanzar desde un modelo integrador hacia uno inclusivo.

La cara B: La autonomía personal

La autonomía personal es, ahora mismo, la “meta” que se quiere lograr en materia de discapacidad. Es decir: en la actualidad, en la mayor parte de los casos las personas con diversidad funcional son dependientes para realizar alguna actividad de su día a día de una tercera persona. el objetivo al cambiar el paradigma integrador y conseguir una sociedad inclusiva, es que las personas disfruten del máximo de autonomía, sin depender de terceras personas en su vida cotidiana. Puede sonar utópico, pero no lo es tanto: concienciación social, políticas preventivas en materia de salud (incluyendo la estimulación cognitiva) y el diseño universal son algunos de los puntos clave que impulsan este cambio.

Debido a diversos factores (infantilización, dificultad en el acceso a los recursos para ello, tabú es culturales, etc), las personas con discapacidad son menos autónomas o, directamente, no participan en las siguientes esferas de la vida cotidiana:

  • Esfera afectivo- sexual
  • Participación en el sociedad
  • Actividades productivas (remuneradas o no)
  • Estudios superiores

Esto está estrechamente relacionado con diferentes aspectos del concepto de salud y, por tanto, puede influir negativamente en ella y ayudar a perpetuar el estándar de discapacidad en estas personas.

Cambio de paradigma ¿Qué implica?

La sociedad actual presenta un paradigma integrador. Eso quiere decir que existen una serie de servicios en el medio hechos en base a las necesidades de la mayoría, y otros servicios para la minoría. A priori no parece algo negativo, ya que podemos pensar que se les está “incluyendo”, es decir: no se les está negando el derecho a participar en la sociedad. La cuestión es la siguiente: al hacer servicios diferentes se perpetúa el estado de discapacidad, es decir, se retroalimenta.

El diseño universal surge para que todos los servicios fuesen concebidos para ser utilizados por todas las personas de la sociedad. Esto no se limita exclusivamente a la abolición de barreras físicas, sino también de barreras cognitivas y sensoriales, las cuales limitan las experiencias de las personas con estos tipos de diversidad funcional, deteriorando considerablemente su salud.

Paradigmas sociales discapacidad, elaboración propia, 2020

En conclusión…

  • La discapacidad es un concepto multidimensional
  • Tiene repercusión en diferentes esferas del concepto holístico de salud
  • Es un asunto de salud pública
  • La prevención es muy importante
  • Debemos mudar el paradigma social de integrador a inclusivo

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